Para influir en alguien necesitas crear dudas en sus mentes. Algunas personas son naturalmente dudosas, especialmente de sí mismas, mientras que otras se conocen bien a sí mismas. Es más difícil influir en alguien que no tiene dudas de sí mismo porque filtran la información que ingresa a través de su autoconciencia. Son rápidos para juzgar qué información sobre ellos es precisa y cuál no. Por otro lado, las personas que no están seguras de sí mismas tienden a creer información sobre ellas, negativas o positivas, dependiendo de su autopercepción. Necesitan una fuente externa para guiarlos a un destino desconocido.
¿Por qué algunas personas son fáciles de influir y otras no?
Related Content
More Interesting