Esta pregunta proporciona una respuesta bastante decente: ¿Cuál es la virtud de dividir el mundo en estados?
Además, si un mundo de fronteras es difícil … intente la des-frontera. No cambiaría fundamentalmente la naturaleza de las agrupaciones humanas, el odio o la violencia. El riesgo de corrupción es mucho mayor y la incapacidad del gobierno mundial para gobernar a miles de kilómetros de distancia por cada decisión que se vio obligada a enfrentar lo convertiría en bancarrota como órgano de gobierno.