Cómo rechazar cortésmente un distribuidor de volantes o un vendedor ambulante

No hay ningún requisito para ser educado, solo un requisito básico para no ser activamente descortés. Sólo ingoralos.

Ellos hacen su dinero de esto. Son como telemarketers, pero físicos. Son como los testigos de Jehová que llaman a su puerta cuando está saliendo con su familia. No merecen cortesía, solo una rápida y firme terminación del contacto.

Recuerda, ellos son los que intentan forzar la interacción contigo. Ellos no merecen nada de usted a cambio.

Pero voy a repetir. Ser activamente hostil o descortés en lugar de ignorarlos pasivamente es un paso demasiado lejos.

En la mayoría de los lugares, solo sigue caminando, pero sonríe y di “no, gracias”. No te detengas.

En San Francisco, omita la sonrisa y diga “no, gracias”. No disminuya la velocidad.

En Nueva York, simplemente no te detengas.

En Los Ángeles, solo mantén tu ventana cerrada.