Cómo llevarse bien con sus compañeros de trabajo.

Cuando me uní a mi oficina actual estaba preocupado. Había interactuado con el equipo antes y tenía mis dudas.

Hoy la señora que parecía increíblemente privada me ha invitado a su boda. La chica que dio una vibra arrogante no duda en pedirme ayuda. El hombre que lo mantuvo “estrictamente profesional” me habla de sus hijos todo el tiempo. Lo más importante es que el jefe que parecía snobby hizo todo lo posible por ofrecerme con éxito un lugar permanente en su equipo, con ascensos.

Aunque tenía mis dudas, busqué ayuda, hice preguntas, mostré interés, me reí de sus bromas, escuché sus historias como lo haría con mis amigos. Pero por encima de todo, siempre traté de ser humilde.

Y de forma gradual pero segura, se calentaron. Me acogieron y hoy formo parte del equipo como cualquier otra persona.

El mantra es no dejar que nuestras primeras impresiones nos impidan ser nosotros mismos. La mayoría de las veces dejamos que nuestros pensamientos controlen nuestro comportamiento y las personas pueden decirlo.

Dale a todos una oportunidad justa y te sorprenderás de cuántos de ellos quieren lo mismo que tú. Encuentra un terreno común y mantenlo agradable. Si va bien, tu corazón no se hundirá un domingo por la noche pensando en el temido ciclo que comienza de nuevo al día siguiente.