Para un hombre, ¿cómo es cambiar de un joven muy guapo a un hombre mayor no tan atractivo?

Jaja, me has descrito. En un momento yo era una chica bastante joven y muy irlandesa, y ahora me parezco a Junior Samples de HEE-HAW.

Entonces, ¿cómo es eso? Bueno, nunca te hagas ilusiones que la buena apariencia no te lleve a ningún sitio. Ellas hacen. Creo que ahora hay bastantes pruebas psicológicas que muestran que el público en general casi siempre prefiere caras atractivas; no solo eso, se atribuirán a la buena apariencia de OTRAS virtudes: Oh, sí, son inteligentes, sabios, exitosos, ricos, agradables, considerados, sociables, y la lista sigue y sigue. Y por eso son contratados y puestos más, en promedio.

Si usted se pone gordo, feo y le faltan dientes y usa lentes, se encontrará entre las sábanas con mucha menos frecuencia y la confiabilidad de los eventos sociales con mucha menos frecuencia.

Sin embargo, no todas las personas guapas están encantadas con la atención que reciben. Conozco a una mujer de 55 años, bella modelo en su juventud, que recientemente se redujo a su peso de 20 años … y de repente se encontró en el extremo receptor de innumerables avances masculinos. Ella creció para encontrar eso muy molesto, incluso degradante después de un tiempo. Así que ella está dando un descanso a esa dieta, jaja.

Una historia fascinante es la de la supermodelo internacional “Nico”, también conocida como Christa Päffgen. Tenía una demanda constante de anuncios de televisión y revistas a lo largo de la década de 1950 y principios de la de 1960, y en 1969 fue invitada por Chanel para ser su covergirl, su “nueva cara”. Ella se negó, a pesar de que le habría traído muchos dólares y fama mundial. Ella odiaba francamente el modelaje. A mediados de la década de 1970, se cansó de pensar que no era más que una cara bonita … Dejó de mirarla por completo, y en la década de 1980 apareció en público como una bruja aterradora y rara.

La verdad es que es difícil seguir siendo joven y de aspecto elegante después de los 50 años, como, por ejemplo, George Clooney, y se necesita mucho dinero para mantener esa apariencia. Para algunos vale la pena; a los demás, no tanto.

Yo era bastante observador en mi juventud. Seguro que ya no lo es. Lo ideal es que aprecie que su valor como persona no está en su comparación con los estándares convencionales de belleza, sino en las cualidades que desarrolla y aporta al mundo.

PS ¡Daría cualquier cosa para parecerme a Jude Law ahora!

Jude Law es muy atractiva.

La experiencia del envejecimiento es diferente para cada persona, un viaje muy individual.