Las personas que son perezosas suelen ser más eficientes. Obtienen lo que quieren casi sin pérdida de tiempo o energía. Esto hace que la persona perezosa sea un buen solucionador de problemas.
Sin embargo, trabajar con una persona perezosa que solo se considera a sí misma puede ser difícil. Las personas perezosas egoístas tienden a ignorar las consecuencias externas de su comportamiento en las personas que las rodean. Es por eso que la pereza puede ser mal vista.