No respondes cuando recibes ese tipo de consejos, al menos no al principio.
La ira te llevará a decir cosas de las que te arrepentirás más tarde. Abrumará todos tus sentidos racionales y te hará atacar a la persona que te dio ese consejo. No te rindas a ese impulso.
En su lugar, gire su ira hacia adentro.
Pregúntate por qué este consejo te hace enojar. ¿Qué suposiciones o creencias desafía el consejo? ¿Cuánto temes que te desafíen esas cosas y por qué? Llegue a la raíz de su enojo y puede encontrar la razón por la cual ese consejo es lo suficientemente profundo como para hacerle daño.
- Odio las tripas de mi compañero de cuarto y no puedo cambiar mi residencia. ¿Qué debo hacer?
- Cómo dejar de temer a las mujeres
- ¿Con qué frecuencia el adulto promedio se encuentra con una persona que la menosprecia o la trata mal?
- ¿Por qué es socialmente aceptable invitar a otros amigos a una ocasión social anteriormente personalizada?
- ¿Cuándo puede una sincera disculpa hacer que el receptor se sienta peor?
Solo después de que te hayas calmado y hayas descubierto por qué ese consejo te molestó, recomiendo responder a la persona que te dio dicho consejo.