¿Qué has aprendido de tener amigos con la PD limítrofe?

En una palabra: no.

Sé que suena horrible, pero no lo digo como un consejo para los demás, solo como lo que he eliminado de mis propias experiencias con antiguos amigos que tenían BPD. Y, sí, todos ellos son ex amigos.

Los amigos que he tenido con BPD tenían todas estas cosas en común:
• Fueron increíblemente amigables y agradables … al principio.
• Eran mentirosos hábiles.
• Se pintaron como víctimas.
• Eran expertos manipuladores y siempre trabajaban en un ángulo, aunque podrían pasar meses antes de que te dieras cuenta.
• Ellos harían todo lo posible para que te sientas en deuda con ellos.
• Afirmaron que odiaban el drama, pero que iban a tomar medidas extraordinarias para crearlo.
• Se lo tomaron todo personalmente.
• No hubo tal cosa como una amistad casual con ellos. Estabas dentro o fuera, con ellos o contra ellos, un amigo o un enemigo.
• Su opinión sobre usted cambió con frecuencia, por lo que nunca supo realmente en qué posición estuvo con ellos o qué esperar.

No digo que todos los que tienen BPD sean así, pero si alguna vez otro vecino me dice que tiene un diagnóstico de BPD, es probable que empiece a buscar otro lugar para vivir.

Los límites son una bendición.

Decir “no” a alguien con BPD puede ser extremadamente difícil y gratificante (eventualmente).

No puedo “obligar” a nadie a hacer nada (p. Ej., Participar en el cuidado personal, elegir mejores parejas románticas, tomar decisiones importantes o no tan importantes). Del mismo modo, no puedo “hacer” que alguien se sienta de cierta manera.

A veces, las personas con BPD dicen intencionalmente cosas para provocar una reacción (por ejemplo, declaraciones hirientes basadas en información personal que usted mismo ha revelado).

Tengo un par de amigos con BPD, y ayudarlos a resolver sus problemas me permite practicar la auto-reflexión con los míos. Es una relación simbiótica en ese sentido. Entendemos los problemas de los demás y nos acercamos a ellos desde perspectivas que están lógicamente basadas en información interna pero emocionalmente en lo externo. Sabemos lo que es tener BPD, pero es más fácil evaluar las situaciones de los demás cuando la persona original se siente con demasiada intensidad para tomar decisiones sabias.

Hasta ahora, he aprendido que ninguna relación, en este momento de la vida, contiene una propiedad única que no se pueda encontrar en otra. Me digo esto a mí mismo y a mis amigos constantemente cuando nos encontramos estresándonos por las relaciones que probablemente ya no estarán en el futuro. Esta idea me ha ayudado a afirmarme en las interacciones románticas, sabiendo que terminarlas siempre es posible si, por cualquier motivo, mis necesidades y sus necesidades son incompatibles.

También he aprendido, observando a otros, que cualquier intento de mejorar que provenga de un lugar de auto-odio probablemente no logrará hacer nada, excepto reforzar el auto-odio. Intento hacer ejercicio regularmente porque merezco un cuerpo sano. Voy a clase en lugar de acostarme en la cama porque merezco aprender nuevas habilidades. Etcétera, etcétera. El odio a sí mismo es una emoción estancada. Estoy haciendo mi mejor esfuerzo para terminar con esto.