¿Por qué la gente quiere creer en lo extraordinario?

Porque lo ordinario es demasiado convencional y a nadie le importa una mierda. Agregue un poco de magia y milagros, y Dios y el todopoderoso Satanás, y tendrá al mundo entero detrás del cuello del otro sin saber realmente por qué luchan. Un poco apesta. Pero esa es la verdad. Más locos que la gente normal.