Cabe destacar que muchos de nosotros, los ancianos, realmente no sabemos cuánto tiempo tenemos. Podríamos gastar todos nuestros ahorros, pensando que pronto lo haremos, luego viviremos otros 20 años incluso como corredores de lo que somos. Podríamos decir todas las cosas que hemos sido demasiado tímidas para decir, y luego encontrarnos en una comunidad de jubilados con las personas que nos molestaron. Podríamos arriesgarnos con nuestra salud y pasar años en la cama. ¿Necesito decir mas?
Dicho esto, no puedo entender por qué el gobierno federal no legaliza el bote y un par de otras drogas recreativas para todas las personas mayores de 65 años en todos los estados. De todos modos, muchos de nosotros nos comportamos como drogadictos la mayoría de las veces, tocando música a todo volumen (es nuestro oído, como veis) y sentados a un par de pies de la pantalla del televisor o de nuestras computadoras. Quedarse dormido a media tarde, luego estar despierto toda la noche. Olvidar … algo, aunque no recuerdo exactamente qué. Riéndonos de nuestras propias bromas, o de momentos aparentemente inapropiados en los cines. Tomando los ojos brumosos sobre Jimi y Janis y Joni. Y así es como vamos “all-in”, por cierto.