Los representantes legales pueden ser muy críticos para defender cualquier tipo de lesiones personales o casos de defensa penal. Sin embargo, considerarlos manipuladores es casi imposible.
Es porque:
• Ser manipulador no es ético
• Podría perjudicar mucho a los clientes.
• Necesitan esfuerzos adicionales para ser manipuladores, lo cual es extraordinariamente meticuloso.
• La manipulación es altamente injusta en la corte.
• Los abogados manipuladores no pueden durar mucho tiempo.
• Podrían ser sujetos a castigos cuando se descubran al hacerlo.
Aunque existen tales razones, ya que los abogados no son manipuladores, podría haber algunos nuevos que deseen ganar argumentos a cualquier costo. Y para ese tipo de abogados, ser manipulador no es gran cosa.
Por lo tanto, es mejor consultar a un profesional legal altamente experto y experimentado, con el que usted nunca corre el riesgo de tales manipulaciones.