En casa, su atención se centra en los irritantes menores y tienden a culpar al sistema y al gobierno. Pero una vez que están en el mundo, se dan cuenta de que las imperfecciones están en todas partes. Luego comienzan a recordar y a darse cuenta de lo silenciosos que eran para ignorar los valores en el hogar. Es entonces cuando cantarán “Saare Jahaan se achha” u otras canciones similares sobre su propio país.
Muchos países del mundo insisten también en que, cuando se encuentren en el extranjero, deben hablar patrióticamente y no criticar al gobierno local. Son libres de hacer eso una vez que estén en casa. India aún tiene que seguir este modelo.