Hay momentos en que la vida se vuelve tan difícil que “permitimos que solo esas personas nos consuelen a quienes realmente nos aman”. El problema aquí es que muy pocas personas nos aman en la realidad. Entonces, cuando la vida se pone difícil, solo deseamos su compañía y no la de los demás. Es bastante común experimentar una fuerza de rechazo hacia los demás (porque cuando intentan consolarnos, lo vemos como “falso”).
…..El tiempo lo cura todo. Lenta y gradualmente, nuevamente permitimos que las personas entren (vuelvan a entrar) en nuestra vida.