Básicamente, no puedes, es una reacción fisiológica.
No importa lo tímido que seas. En realidad, la autoconciencia puede ser la incapacitación aquí.
Escríbalas, habla de ellas con alguien que conozcas o no, déjalo salir. Eso es lo primero que debes hacer para que no te coma por dentro.
La meditación puede ayudar, pero solo por el tiempo que pasa meditando (o dos veces ese tiempo de dar o recibir). Podrías ahogarte haciendo muchas otras cosas para enfocarte en otros temas, pero, nuevamente, solo presionas “pause”.
Hablar de eso, encontrar la razón por la que tiene esos pensamientos, resolver el problema relacionado con esos pensamientos es la solución: siguen regresando porque esto es un asunto pendiente.
Cierra el trato, y sus posibilidades de dejar esos pensamientos atrás son realmente altas 🙂