Tómate un momento para pensar en tus prioridades. ¿Qué es lo que siempre pondrías primero sobre alguien o algo? Digamos que tu prioridad es tu perro:
- Pasarías el mayor tiempo posible con tu perro.
- Le mostrarías amor y cuidado incondicional a tu perro.
- Haz sacrificios por tu perro ya que nada es más importante para ti.
- Invertirías tu dinero para mantener a tu perro tan sano como sea posible para que puedan ser felices.
- Pensarías en tu perro, mantendrías fotos y recuerdos de ellos a tu alrededor todo el tiempo para recordarte de ellos.
- Dile a otras personas lo increíble que es tu perro.
Si se le muestran rasgos similares, entonces es una prioridad.