¿La mayoría de las personas aprecian sus trabajos y detestan la apreciación de sus cuerpos? ¿Por qué?

Estamos entrenados para que nuestros cuerpos vengan a nosotros desde el nacimiento. Aunque hacemos ejercicio, comemos y acondicionamos el cabello, los pies, las uñas, la piel, esto es una cuestión de salud. Todos lo hacen más o menos y algunas personas reciben el regalo de la belleza y no les cuesta ningún esfuerzo mostrar esa belleza.

Sin embargo, escribir es una expresión de nuestra belleza interior y apreciación del mundo que nos rodea. Se requiere trabajo para ver y comprender a los demás y para trabajar en todas nuestras batallas con nosotros mismos con hambre, especialmente con emociones negativas como la envidia, el odio, el hambre y, además, perdonarnos a nosotros mismos ya los demás por ser humanos.

La historia del mundo se basa en sentir dolor y reaccionar a él.

Escribir es una habilidad perfeccionada a lo largo de los años y editada para presentar lo que más beneficiará a los demás, incluso si solo les ayuda a entender algo terrible acerca de nosotros mismos que hemos luchado para superar.

Apreciamos los cumplidos que reconocen el cuidado, el estudio, la inspiración y el arte que hemos trabajado para presentar, mientras que las cosas que nos da la naturaleza y que no requieren trabajo, pensamos que el agradecimiento pertenece a Dios o a nuestros padres o suerte.