La intuición, o empatía, no se basa en “pocos hechos”, se basa en la capacidad del cuerpo para “sentir” o sentir ciertas cosas sobre alguien, algo, algún evento.
Cuando estoy hablando con alguien, puedo “leerlo” no solo por lo que dicen, sino por lo que NO dicen. Esto puede tener que ver con ser escritor, pero me convertí en escritor para asegurarme de que lo que dije era lo que quería decir.
Las palabras no siempre son objetivas o útiles. De hecho, siempre me encanta señalar las inconsistencias con los anuncios que atraen a los vulnerables a pensar que hay un “nuevo producto” para ayudarlos.
Aquí hay un ejemplo:
- ¿Cómo podemos ser amables en un mundo cruel?
- Cómo motivar a los estudiantes a mejorar
- ¿Es natural no desarrollar una relación cercana con alguien?
- Cómo evitar faltarle el respeto a alguien.
- ¿Hay príncipes encantadores del príncipe? ¿Los que son dulces en la mentira y tienen múltiples asuntos?
- Un infomercial en televisión habla de la capacidad de los estafadores para escanear, leer, grabar y usar los datos de su tarjeta de crédito
- Ofrecen una solución: su nueva billetera especial, protegida por seguridad, probada contra rayos UV, (etc.) que mantiene sus tarjetas a salvo de los estafadores.
- Para pedir el producto, debe llamar y darles su número de TARJETA DE CRÉDITO, exp. Fecha, código de seguridad.
- Entonces, ahora tienen su información que USTED PAGÓ PARA DARLOS, y saben que tiene suficientes tarjetas que necesita para protegerlos de los estafadores.
- Estafa perfecta
¿Intuición? → Sus palabras no significan nada; solo tienes que seguir lo que están diciendo y darte cuenta de lo que no están diciendo. “Envíenos sus números de tarjeta de crédito para que podamos usarlos”.
No estoy diciendo, de ninguna manera, que la compañía esté haciendo algo mal, solo estoy mostrando cómo “escuchar palabras” pero no tener “intuición” puede cambiar todo el contexto.