¿Cuándo tienes la autoridad para decir algo?

La (triste) verdad es que la mayoría de las personas con opiniones fuertes no tienen ninguna autoridad para defender sus posiciones con hechos. La mayoría de las personas argumentan basándose en la emoción, la creencia, la desinformación y el uso de falacias lógicas. Pero, ¿esto los detiene? ¡De ninguna manera!

Si tienes algo que decir, solo dilo. No necesitas permiso. Y es mejor que tenga datos con los que se respalde, pero tenga en cuenta que a otras personas puede que no les importe.

Sin embargo, si quieres aprender algunos trucos retóricos, echa un vistazo al clásico libro de Arthur Schopenhauer, “El arte de ser correcto”. Escribí una versión actualizada y ampliada de su libro titulado “El NUEVO arte de tener la razón”.

Deben suceder dos factores para que usted defienda su posición con éxito: debe tener razón con la prueba (no solo con la opinión) y la necesidad de hacerlo.

Nadie quiere verse mal, pero solo saldrás viéndote infantil y vengativo si solo estás refutando la opinión. En su lugar, hazlo solo si estás siendo privado de algo con la copia de seguridad de la documentación. Si no eres capaz de arruinar tu credibilidad.