¿Los catalanes no les gustan o odian a los extranjeros? Si es así, ¿por qué?

Bueno, los catalanes tienen leyes severas contra la cultura extranjera en sus provincias gobernantes en España, hasta el extremo donde no se podría establecer un pub irlandés en Barcelona sin nombrarlo en catalán, a menos que quiera pagar impuestos adicionales al gobierno catalán porque No lo nombraste en catalán.

No hace mucho, la alcaldesa de Barcelona, ​​Ada Colau, decidió utilizar a los turistas como una salida para las frustraciones de los ciudadanos catalanes.

Por no hablar de las pinturas “anti-turísticas” en cataluña.

Fuente: las hordas turísticas de Barcelona son el blanco de la nueva alcaldesa Ada Colau.

Fuente: Barcelona dice que los turistas son peores que la pobreza.

Fuente: nuevo alcalde de Barcelona impone freno al turismo.

Fuente: Barcelona lucha con la creciente ola de turistas.

Lamentablemente, Cataluña en sí misma ha estado en declive cultural desde la crisis financiera de 2008, y el nacionalismo y el odio hacia los extranjeros ha sido la salida para los frustrados catalanes.

¿Qué?
Amamos a los extranjeros.
Como ejemplo, en las últimas 2 elecciones dentro de la Asamblea Nacional Catalana (la principal organización del movimiento a favor de la independencia), la candidata más votada fue Liz Castro (Liz Castro), y es probable que se convierta en la próxima presidenta del ANC.

Tanto para odiar a los extranjeros.