Puede preguntarle a su amigo si los bebés nunca deben tratar de caminar porque no pueden hacerlo bien.
Aprendemos de intentar y fallar. Sí, por supuesto que sería genial si pudiéramos aprender perfectamente sin practicar, y luego poder hacer las cosas bien la primera vez que cerramos nuestros libros y salimos al mundo. Pero no es así como funciona el mundo.
En este ejemplo de una carretera, si realmente necesita dos carriles en ambas direcciones, por supuesto, sería mejor si eso es lo que realmente se construye. Pero a menudo tenemos que elegir entre un solo carril o ninguna carretera.
Hay un dicho: “Lo perfecto es el enemigo de lo bueno”. Si insistimos en la perfección, en “hacerlo bien”, a menudo no se hace nada en absoluto.
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Así que hazlo bien cuando puedas. Pero a veces la mitad de lo que necesitas es mejor que nada.