Use su naturaleza extrovertida para su ventaja al mostrar un interés genuino en otras personas. Filtra tus comentarios, expresando ideas positivas. Dale a la gente el beneficio de la duda, cualquiera puede tener un mal día. Escuche más de lo que habla, y no ofrezca consejos a menos que se lo pidan. Desarrolla empatía para que otros entiendan de dónde vienen, no de dónde quieres que vengan. Camine una milla en sus zapatos para comprender sus perspectivas y visiones del mundo. Está bien ser asertivo, defender su posición, compartir sus opiniones, simplemente mezclar un poco de tacto y compartirlos con amabilidad como la intención.
Practique esto y el nerviosismo desaparecerá y desaparecerá rápidamente a medida que la gente vea el cambio en su enfoque.