Las celebridades propagan y predican la moral, ya sea gratis o por un precio. Y su mensaje tiene una gran influencia en el público, lo que es más importante, los niños y los jóvenes. Pero las acciones de algunos en la vida real también son deplorables y desagradables. Entonces, ¿qué derecho moral tienen ellos para predicar a otros? Ninguna.
Eche un vistazo a dos casos que se han informado ampliamente en las noticias en los últimos tiempos, lo que suscita serias dudas sobre la integridad y el comportamiento de algunas de las celebridades de primera categoría que son adoradas como dioses. Pero, ¿son realmente dioses y merecen ser tratados como tales?
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