¿Por qué la gente deja de usar una lista de tareas?

Aprendí que tengo un sentido rápido, pero en gran parte ilusorio, de progreso cuando hago una lista de tareas pendientes.

Hago menos que hacer listas cuando me siento relajado y productivo. Cuando estoy estirado o me siento abrumado, es un mecanismo de supervivencia semiproductivo.

Se hace una lista de tareas para intentar seguir una rutina o llevar una vida planificada. Varias veces he hecho esas listas y he tratado de seguirlas, pero en vano. Lo que personalmente he sentido es que las listas de tareas nos presionan y siguen siendo molestas. El resultado es que, o bien terminamos haciendo la tarea o seguimos postergándola hasta el punto de que finalmente dejamos de seguirla.