No soy un “defensor gay”, soy un defensor de los derechos humanos .
Defiendo el derecho de las personas religiosas a practicar libremente la religión de su elección (siempre que no lastimen a nadie ni intenten quitar los derechos de los demás al practicar dicha religión), aunque soy un ateo. Porque las personas religiosas son humanas.
Apoyo los derechos civiles de las minorías y POC, aunque no soy una minoría o un POC, porque las minorías y POC son humanos.
Y apoyo la igualdad de derechos para las personas LGBTQ + a pesar de que no soy LGBTQ +, porque las personas LGBTQ + son personas.
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(También apoyo el trato justo y amable de los animales, incluso los criados para el consumo humano, porque, bueno, los animales también son personas).
También tengo seres queridos que son LGBTQ +. Tengo un amigo gay muy cercano que tiene miedo de ser completamente abierto acerca de su sexualidad porque tiene tanto miedo de ser golpeado por eso (no pretende ser heterosexual, pero no revela abiertamente su sexualidad a nadie hasta que Los conoce un poco). Es horrible, sentir que tienes que ocultar cualquier parte de quién eres cuando no estás haciendo daño a nadie. Y seguiré intentando hacer del mundo un lugar donde él y otras personas LGBTQ + no tengan que preocuparse por eso. Porque creo en la igualdad de derechos.