En realidad es liberador. Escribir un diario me ha dado la fuerza para manejar situaciones difíciles y me ha golpeado en el trasero cuando me he obsesionado con un problema durante meses y meses. La lectura de registros pasados, si decide hacerlo, le permite ver patrones de pensamiento que hacen maravillas para usted o hábitos contraproducentes. Cuando era adolescente, no tenía muchos amigos cercanos con los que pudiera hablar, y escribir un diario me ayudó a ser más fuerte, seguro y confiado.
Me permite escribir mis pensamientos más íntimos y depender de mí mismo cuando nadie más está cerca para escuchar.
Me ha ayudado a seguir adelante.
El único inconveniente de escribir un diario es cuando las personas (especialmente familiares y amigos) no respetan su privacidad y comienzan a leerla. Recuerdo haber encontrado a mi madre leyendo mi diario cuando tenía doce años; aunque le dije que no lo hiciera, y no la he visto haciéndolo de nuevo, todavía tengo problemas para confiar en ella.
- ¿Por qué tanta gente se siente incómoda con vivir en el presente?
- ¿Por qué algunas personas no tienen ganas de cambiar la imagen de su perfil a menudo, a diferencia de muchas otras?
- ¿Es posible ser físicamente adicto a otro ser humano?
- ¿Cuáles son los mayores problemas o dilemas no resueltos de la gente?
- Cómo aprender a ser más agresivo en el cricket.
En pocas palabras: encuentre un buen lugar para ocultarlo o déjele saber que es un registro privado, para que nadie lo vea.
Escribir diarios es una experiencia maravillosa y empoderadora.