Si la pregunta es grosera y obvia, puede ser un insulto.
como en el caso de alguien que dice “¿Por qué una persona gorda y estúpida como tú intenta aprender a bailar ballet?”
Por otro lado, podría ser una advertencia, como en “¿Eres un completo idiota que toca artículos eléctricos cuando tienes las manos mojadas?”
O incluso podría ser un consejo como “¿Estás totalmente loco saliendo con ese tipo cuando sabes que te engaña?”
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Las preguntas groseras y obvias son el pilar del humor, y Groucho Marx se ganaba la vida haciendo esas preguntas.